Dentro de esta especialidad se abordarán trastornos del neurodesarrollo, dificultades del aprendizaje y de la comunicación, alteraciones tanto en la expresión oral como escrita (dislexia), TEA, retraso del lenguaje, dificultades en la lectoescritura… Se trabajará de forma coordinada con el centro educativo del paciente para garantizar en todo momento una intervención lo más completa y eficaz.

Se evalúan e intervienen todas las estructuras y funciones que abarcan el complejo cabeza-cara y cuello en niños y adultos. Entre las funciones asociadas podemos encontrar la respiración, la masticación y la deglución. La intervención en estos casos se centrará en mejorar la posición, el tono y la funcionalidad de las estructuras anatómicas que se vean alteradas.

Mejoramos la calidad de vida de las personas que sufren cualquier tipo de daño cerebral, que han sufrido un accidente cerebrovascular, o que padecen algún deterioro cognitivo y como consecuencia de ello, se ven afectadas su capacidad de comunicación y/o sus funciones orofaciales asociadas. Se interviene sobre afasia, disfagia, enfermedad de Alzheimer, Parkinson…

La implicación familiar y un buen feedback con el paciente es imprescindible para que el tratamiento sea eficaz.