El cambio de las estaciones del año implica también un cambio en nuestros hábitos de vida. La llegada del verano implica una mayor cantidad de horas de luz, por lo que nuestra actividad se ve incrementada. Algo que afecta también a nuestros hábitos alimenticios, no sólo en el cambio de productos sobre el que se basa nuestra alimentación, sino también las horas en las que comemos.
Durante el otoño, invierno y gran parte de la primavera las horas de las comidas suelen estar más definidas, debido a los horarios laborales o escolares, en verano éstas suelen verse afectadas. Días más largos y menos obligaciones laborales hacen que, muchas veces, los desayunos y las cenas se hagan más tarde y de forma menos adecuada. Esto tiene una mayor incidencia en nuestros hijos, que debido a las vacaciones escolares, sus comidas suelen retrasarse en relación a los horarios habituales.
Esos cambios afectan a nuestro organismo, ya que los procesos de asimilación de los alimentos son distintos si son consumidos de día o de noche, pues la respuesta biológica no es igual. De igual forma que no se asimilan igual los azúcares o carbohidratos por la noche que por la mañana, tampoco se asimilan igual los alimentos si, por ejemplo, se consumen a las 21:00 que si los tomamos a las 22:30.
Estudios constatados han determinado que, comer antes de las 15:00, ayuda a adelgazar. No sólo debemos atender al producto y cantidad del mismo que ingerimos, sino también en qué horarios lo hacemos. Es más probable que una persona que desayune temprano y de forma equilibrada con un desayuno basado en lácteos, hidratos de carbono, azúcares, étc. tenga un peso adecuado, que una persona que no desayune o lo haga forma ligera. Lo mismo pasa con las cenas, pues aquellos que cenan tarde y de forma contundente con ingiriendo hidratos de carbono, grasas o azúcares tienen más probabilidades de no estar en su peso ideal o incluso ser obesos.
Aunque sea complicado ahora que llega el verano y el buen tiempo es recomendable que, a pesar de los cambios de nuestra actividad, sigamos manteniendo las pautas horarias recomendadas, comer en torno a las 14:00-14:30 horas y cenar sobre las 20:30-21:00 horas.
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